Siempre positivo
|Durante estos últimos años me he ganado la fama de ser una persona extremadamente optimista a causa de mis opiniones en el podcast y algunos de mis artículos en Nintenbit. Y la realidad es que no me considero así para nada. Ni en la vida real, ni en lo que respecta a esta afición. Lo que ocurre es que el drama, la exageración y el sabiondismo que inundan este mundillo me cansan y aburren por partes iguales. Por lo general, intento ver las cosas de la forma más racional posible y disfrutar de lo que hay, que para eso están los videojuegos. O eso es lo que me digo a mí mismo.
Quizás os esté contando todo esto a modo de excusa y así poder justificar una sensación que me ha invadido los últimos días y de la que soy consciente que no comparte demasiada gente. Os puede parecer mentira, pero dando un repaso a los poquitos juegos físicos que en principio verán la luz para Wii U este año, me apetece mucho jugarlos casi todos, aunque no se traten de mis franquicias favoritas ni de géneros que me vuelvan loco. También tengo muy claro que a este estado de ánimo contribuyen los últimos rumores sobre un nuevo Paper Mario, el posible lanzamiento de Pikmin 4 si los comentarios de Miyamoto de hace unos meses se hacen realidad, y una eShop cargada nuevamente de juegos.
Sin duda Nintendo se lo ha trabajado de lo lindo para que 2016 sea el “año X”. Y no lo digo por nada relacionado con Xenoblade Chronicles X, sino porque como venimos apuntando machaconamente en Wii Podcast Plus, este año es el de la incertidumbre. Por NX, y porque apenas tenemos idea de lo que va a ser el catálogo durante los doce próximos meses. En contraste con esta situación, me hizo bastante gracia leer hace tan solo unos días un anuncio de Sony a doble página en una prestigiosa revista (sí, de las de papel) en el que se detallaba con pelos y señales las fechas de lanzamiento de algunos de los juegos más destacados del primer trimestre de PS4.
En todo caso, me parece que el año no empieza mal del todo. Entre marzo y abril tenemos Pokken Tournament, StarFox Zero y The Legend of Zelda: Twilight Princess HD. Un buen aperitivo para ir aguantando el primer semestre, que no está por debajo de lo ofrecido otros principios de año. Más tarde deberían llegar Shin Megami Tensei X Fire Emblem, y por supuesto, el nuevo The Legend of Zelda. Además espero que nos caigan al menos una sorpresita o dos por el camino en la línea antes apuntada.
De los Zeldas no os voy a hablar mucho porque ya doy por hecho que todo el mundo los espera con los brazos abiertos, tanto el remake como la nueva entrega, y si os digo la verdad es esa gran expectación generalizada la que me hace perder interés. Uno que es así. En el caso de Twilight Princess, a pesar de disfrutarlo bastante en Wii, no es mi juego preferido de la saga ni de lejos. Sus pasilleras primeras horas me dejaron un mal recuerdo que todavía no he conseguido borrar.
Pese a no ser un gran aficionado ni a Pokémon ni a Tekken, tengo bastantes ganas de hincarle el diente a Pokken Tournament. Se presenta como una alternativa más que interesante a las escasas opciones de lucha de las que se pueden disfrutar en Wii U (Super Smash Bros. Wii U, Tekken Tag Tournament 2, Injustice God among Us y para de contar). También suma que sea un juego diseñado por Namco Bandai para los arcades japoneses y exclusivo de la consola de Nintendo. Y el mando especial del juego (una especie de mando de SNES hortera) es lo más, no me lo podéis negar.
Por otro lado, quien me ha escuchado estos últimos meses, sabe que soy de los pocos que han defendido abiertamente (con la boca pequeña, eso sí) StarFox Zero. El juego ha sido muy criticado por un look de polígonos rudimentarios que no dudo que ha sido deliberadamente buscado por Nintendo y Platinum Games con el fin de evocar las entregas de SNES y N64. Más que un aspecto gráfico que no veo criticable, sí que me preocupan las quejas que se oyeron y leyeron en el E3 respecto a los controles. Veremos si el retraso de casi 6 meses le ha venido bien al juego, y renace en plena forma una saga que lleva demasiado tiempo ausente.
Por último, y sorprendentemente, el juego que se ha ganado un hueco fijo en mi agenda y en el que más esperanzas tengo puestas, es Shin Megami Tensei x Fire Emblem (o GenaroIvanRoqueFEr o algo así; por favor, que Nintendo localice el nombre a la de ya). Después de escuchar con atención el último programa de The Axe of the Blood God (nombre de podcast molón donde los haya), que os recomiendo a todos los aficionados a los juegos de rol, mis expectativas se han disparado con esta colaboración entre ATLUS y Nintendo. Y eso que fui el primero en no ver más allá de estereotipos y calificar el juego de «japonesada». Sin embargo, cuanto más leo y escucho hablar del juego, más claro tengo que va a ser mi primera incursión en la saga Shin Megami Tensei: tanto la ambientación, el sistema de combate y los valores de producción parecen estar a una gran altura, y algo me dice que cometeré un gran error si decido ignorar el juego en su lanzamiento.
Quizás este 2016 de incertidumbre y pocas expectativas termine por convertirse en uno de los años más interesantes de la corta de vida de Wii U. Quién sabe. Por mi parte, ya véis que no tengo intención de perdérmelo.
A mi me cuesta defender este año. Que sí, que lanzamientos haylos, pero no los veo ni con el atrevimiento de Splatoon o Mario Maker, ni con las ambiciones de X. En fin, relleno más o menos correcto, un port, un juego retrasado (aparentemente) desde el ’96 y un juego que será interesante (dudo que en ATLUS se hayan vuelto idiotas de repente) arruinado por un envoltorio irritante y hortera.
En fin, si te parece bien te los quedas todos, yo supongo que andaré por la eShop xD
Más que defender este año, que no es mi intención, la entrada quería describir un estado de ánimo respecto a algunos de los próximos lanzamientos. Es evidente que este 2016 no va a estar ni de lejos al nivel de calidad del año pasado en lo que se refiere a juegos físicos. Splatoon, Súper Mario Maker, Xenoblade Chronicles X y Yoshi’s Woolly World son cuatro pesos pesados difíciles de superar.
Pero pese a ello, tampoco creo que tengamos que descartar de plano lo que en principio sale este año. Precisamente son de estos juegos de los que esperamos poco de donde surgen las mayores sorpresas.
De todas formas, estoy contigo en que el mejor contenido de la consola vendrá con seguridad de una eShop probablemente más cargada de títulos que la del año pasado. 😉
Yo este año lo afronto un poco a salto de mata. De momento no me hago demasiadas ilusiones y la perspectiva no es muy halagüeña. De 3DS sólo me interesa Hyrule Warriors (del que aún dudó si comprar la versión de WiiU) y Dragon Quest VII (que aún me lo tienen que vender). De Wii U, compraré el Zelda (muy, muy lejano) y dudó con Starfox. El año está prácticamente desértico. NX es una incógnita y no sé si podré comprarla de salida… total, a salto de mata según vayan pasando los meses veremos como evoluciona el año. Menos mal que tengo mucho juego pendiente, entre ellos Xenoblade X.
Pues me cayó muy bien este artículo. Tengo mi WiiU esperando títulos y al igual que tu, los que llegan no me dejan indiferentes. No veo el tema de los juegos como algo trascendental, por eso lo que venga lo recibo con agrado…no voy a dejar de dormir o comer, pero seguro que me divierto con los que traen…eso si, siempre es mejor tener más de donde escoger…espero un par de títulos ocultos que espero que sean de buena calidad.